sábado, 7 de febrero de 2009

WALT WHITMAN, TRADUCIDO POR JOSÉ MARTÍ



When you read these I that was visible am become invisible,
Now it is you, compact, visible, realizing my poems, seeking
me,
Fancying how happy you were if I could be with you and
become your comrade...

(FULL OF LIFE NOW)

Cuando leas esto, yo que ahora soy visible, me habré vuelto
invisible.
Entonces tú serás compacto, visible, y realizarás mis poemas,
volviéndote hacia mí,
Imaginando cuán dichoso sería yo si pudiese estar contigo y
ser tu camarada...

¿Quién es y qué es lo que canta el poeta que se adora a sí mismo?

w.w., WALT WHITMANN, aquí, es observado por el glorioso cubano que dio a su patria todo: su independencia, su sangre y su enorme talento, JOSÉ MARTÍ

WW, cantándose a sí mismo:



“América carece aún de vida interior, de vida religiosa y familiar,
sus mujeres se diluyen en visitas y comadreríos, no son madres de familia...”
Una casi total indiferencia en los primeros días, fue seguida por
agrias críticas y censuras de todos aquellos que habían recibido los ejemplares
enviados por W. W. Parece ser que sólo se vendió un ejemplar.
Nadie se percató en un principio de la trascendencía que en un futuro
muy próximo tendría este hermoso libro de un norteamericano vigoroso
tanto de cuerpo como de alma. El 21 de julio de aquel año, W. W. tuvo
el infinito consuelo de recibir una carta de Emerson, en la que le decía:
“No puedo cerrar los ojos ante el valor de este maravilloso presente
que es Hojas de Hierba. Encuentro que es la más extraordinaria obra
de intuición y de sabiduría (wit and wisdom) que América ha producido
hasta el presente. Me he sentido muy feliz al leerlo, porque su gran
fuerza nos hace felices... Encuentro cosas incomparablemente expresadas,
tal como deben serlo...” Emerson confirmó su juicio visitando al poeta.
El autor comienza escuchándose y cantándose a sí mismo para enseñar
a sus semejantes. Su poesía rehuye el léxico y la métrica comunes,
W. W. es el poeta de la vida universal, inagotable e inmortal,
pues que la muerte no es más que un aspecto de la vida que sin cesar
avanza. ¿Quién es este W. W.? Un cosmos en unión con el
cosmos universal, un alba. Nada es pequeño ni despreciable. Los animales,
en su inconsciencia, son tan admirables como los hombres.
La simpatía del autor alcanza a todos los hombres, particularmente
a los que están enfermos, a los inmorales. Esta poesía de simpatía
es alentadora y crea una religión que sustituirá a las
antiguas: la del trabajo. Por otra parte, W. W.
cree que Dios está de manifiesto en la inmensidad temporal y especial, en la integridad
del ser, cuerpo y alma, del hombre.



CANTO A MÍ MISMO

(Song of Myself)
1
Yo mismo me celebro y a mí mismo me canto;
Y mis pretensiones serán las tuyas,
Pues que cada átomo mío también te pertenece.
Vago y a mi alma la incito;
Vago y holgazaneo a mi antojo, contemplando la brizna
de hierba estival.
Casas y aposentos llenos de perfumes están- las alacenas
saturadas de perfumes se hallan;
Aspiro yo mismo la fragancia y, complacido, la reconozco;
El vaho también me amenaza, pero yo no lo tolero.
La atmósfera no es un perfume- no tiene el dejo de la
destilación- es inodora;
Ella es para mi boca eternamente. De ella estoy enamorado;
Llegaré a la represa atravesando el bosque y, candoroso,
desnudándome,
Enloquecí al sentir su contacto.
Mi lengua, cada átomo de mi sangre, formados
de este suelo, de este aire,
Nacido aquí de padres, nacidos aquí de padres también
aquí nacidos,
Yo, ahora de treinta y siete años de edad, en perfecta
salud, comienzo,
Esperando no cesar más hasta la muerte.
Credos y escuelas a la expectativa,
Retirándome por un momento, teniendo suficiente de lo
que ellos son, pero sin olvidarlos nunca,
Yo ofrezco abrigo para el bien o para el mal,
Yo dejo hablar a todos a la ventura,
La naturaleza desenfrenada con la energía original.



2
El vaho de mi propio aliento;
Ecos, ondas, susurros, raíces del amor, filamentos de seda,
los caprichosos sarmientos y la vid;
Mi respiración y mi inspiración, el latido de mi corazón, el
paso de mi sangre y del aire a través de mis pulmones;
El aroma de las verdes hojas y el de las hojas secas, y el
de la ribera, y el oscuro color de las rocas marinas y
el del heno en el henil;
El sonido de las palabras musitadas por mi voz, palabras
arrojadas a los remolinos del viento;
Unos suaves besos, unos cuantos abrazos, un ceñir de
brazos;
El juego de luces y de sombras entre la arboleda cuando
la brisa la balancea;
La deleitosa soledad, ya en medio del bullicio callejero, ya
en la inmensidad de los campos y en las laderas de los
montes;
La sensación de la salud, los trinos bajo la luna llena, la
canción de mi despertar en el lecho encontrándome
con el sol.
¿Has contado alguna vez mil acres? ¿No has calculado que
toda la tierra era mucho?
¿Has empleado tanto tiempo para aprender a leer?
¿Te has sentido orgulloso al desentrañar el sentido de los
poemas?
Detente este día y esta noche conmigo y alcanzarás el
origen de todos los poemas;
Poseerás lo que es bueno de la tierra y el sol (quedan todavía
millones de soles);
No tomes más las cosas procedentes de una segunda o tercera
mano, no mires a través de los ojos de la muerte,
no te alimentes con los espectros de los libros;
Tampoco quiero que mires a través de mis ojos, ni que
recibas las cosas de mí;
Escucha las voces procedentes de todos los lados y tamiza
las que hasta ti lleguen.

3
He escuchado lo que los charlatanes decían, la charla del
principio y la del final;
Pero yo no hablo del principio ni del final.
Jamás existió otro comienzo que este de aho
Ni más juventud ni vejez que la de hoy;
Y jamás existirá otra perfección que la de ahora,
Ni otro paraíso ni otro infierno que este de hoy.
Impulso, impulso e impulso;
Siempre el creador impulso del mundo.
Más allá de la oscuridad emergen oponiéndose los iguales
- siempre sustancia acrecentándose, siempre sexo;
Siempre una fusión de identidad, siempre una distinciónsiempre
engendrando la vida.
Elaborar no tiene importancia- sabios o necios lo realizan
por igual.
Firmes en el más sólido convencimiento, aplomados en su
probidad, bien aferrados, abrazados a las vigas,
Recios como potros, amorosos, arrogantes, eléctricos,
Yo y este misterio, henos aquí de pie.
Límpida y amorosa es mi Alma, y limpio y amante es todo
cuanto nada tiene de mi Alma.
Si uno falta, ambos están ausentes, y lo invisible queda
demostrado por lo visible.
Hasta que lo visible se torne invisible y, a su vez, lo
compruebe.
Mostrando lo mejor y, apartándolo de lo peor, el tiempo
hostiga al tiempo;
Conociendo la perfecta fineza y la ecuanimidad de las cosas,
mientras ellos discuten, yo permanezco en silencio, y
voy luego a bañarme y admiro mi propio cuerpo.
Bienvenido sea cada órgano y cada uno de mis atributos,
y también los de todo hombre cordial y puro;
Ni una pulgada, ni la partícula de una pulgada de mi ser,
es vil, y ninguna partícula deja de corresponder con
las restantes.


Estoy satisfecho- Yo veo, bailo, río, canto:
Mientras, la acariciante y amorosa Compañera de lecho
duerme a mi vera durante la noche, y al amanecer se
aleja con furtivos pasos,
Dejándome cestas cubiertas por blancos lienzos, que regocijan
la casa con su abundancia.
¿Diferiré mi aceptación y mi realización, volveré mis atribuladas
miradas
Con objeto de que ellas dejen de contemplar el futuro a
lo largo de la ruta,
Y de inmediato me estimen más o menos en un céntimo,
Exactamente el valor de uno y exactamente el valor de
dos, y hasta cuál es el precio máximo?



4
Curiosos y preguntones me rodean
me encuentro entre la gente- Lléganme los recuerdos de
mi temprana vida, o del barrio y de la ciudad donde
viví, o de la nación,
Las recientes fechas, descubrimientos, invenciones, asociaciones,
autores viejos y nuevos,
Mi comida, vestidos, amistades, cuidados, cumplimientos,
deudas,
La real o ficticia indiferencia de algún hombre o mujer
amados,
Las dolencias de los míos, o de mí mismo, o las malas
acciones, o la carencia o la pérdida de dinero, o las
depresiones o las exaltaciones;
Batallas, los horrores de la guerra fratricida, la fiebre de
las noticias dudosas, los sucesos inciertos;
Estas cosas hasta mí llegan día y noche, y luego se apartan
de mí,
Pero no constituyen parte de Mí mismo.
Apartado estoy de tirones y empellones;
Permanezco alegre, complacido, compasivo, ocioso, íntegro;
Miro alrededor, erguido, o bien, apoyando un brazo sobre
mi impalpable aunque seguro apoyo,
Mirando, con la cabeza ladeada, en espera de lo que ha
de acontecer;
Metido dentro y fuera del juego, y contemplando maravillado
lo que ocurre.
Miro hacia atrás y me veo en lo días en que vagaba a
través de la niebla, acompañado por lingüistas y polemistas;
No tengo burlas ni argumentos- Miro y espero,


5
Creo en tí, alma mía- El otro que soy no debe rebajarse
ante ti;
Y tú no debes rebajarte ante el otro.
Acuéstate conmigo sobre la hierba- cállate;
No quiero palabras, ni música, ni ritmos- ni trajes, ni
lecturas, aunque sean lo mejor,
Sólo tu arrullo me agrada, el susurro de tu contenida voz.
Recuerdo cómo una vez que estábamos tendidos, durante
una transparente mañana de verano,
Apoyando tu cabeza de través sobre mis muslos, te volviste
gentilmente hacia mí,
Entreabriendo la camisa sobre mis pechos, hundiste la
lengua hasta mi desnudo corazón,
Y tendiéndote a lo largo de mi cuerpo, a él te adheriste
desde mis barbas hasta los pies,
Rápidamente se irguieron y se esparcieron en torno mío
la paz y la sabiduría, que superan a todos los argumentos
de la tierra;
Y sé que la mano de Dios es la promesa de la mía,
Y sé que el espíritu de Dios es hermano del mío,
Y que todos los hombres nacidos son mis hermanos, y las
mujeres mis hermanas y mis amantes,
Y que el germen de la creación es el amor,
Y son incontables los erectos o marchitos tallos que cubren
los campos;
Y las oscuras hormigas afanándose debajo de aquellos más
tiernos;
Y las musgosas costras que recubren las carcomidas vallas,
los montículos de piedras, el saúco, el gordolobo y el
eléboro.


6
Un niño preguntó: “¿Qué es la hierba?”, mostrándoseme
con sus manos colmadas;
¿Qué podía responderle? Yo ignoro, como él, qué es la
hierba.
Supongo que debe ser la bandera de mi índole, urdida con
la verde sustancia de la esperanza.
O bien barrunto que es el pañuelo del Señor,
presente abandonado adrede como un recuerdo,
Quizá el nombre del dueño aparece en uno de sus ángulos
para que viéndolo, nos preguntemos: ¿de quién es?
O bien adivino que la hierba misma es un niño, la tierna
criatura nacida de la vegetación.
O sospecho que es un uniforme jeroglífico,
Y que quiere decir: La germinación es igual, tanto en las
zonas amplias como en las zonas estrechas,
Crecimiento entre los negros lo mismo que entre los
blancos,
Kanuck, Tuckahoe, Legisladores, Cuff, yo los acojo y los
recibo lo mismo.
Y ahora la hierba me parece que es la hermosa cabellera
intonsa que cubre las sepulturas.
Tiernamente quiero tratarte, rizada hierba;
Quizá eres la traspiración que exhala el pecho de los adolescentes;
Es posible que, de haberlos conocido, yo los hubiera amado;
Quizá provienes de los viejos, de las mujeres, o bien de las
criaturas prematuramente arrancadas del regazo materno;
Y que aquí eres tú el regazo materno.
Esta hierba es demasiado oscura para provenir de las blancas
cabezas de las ancianas madres;
Más oscura que las descoloridas barbas de los ancianos;
Oscura para provenir del borde tiemamente rojo de los
labios.
¡Oh! Después de todo, escucho muchas lenguas clamando.
Y me percato también de que no por nada ellas proceden
de lo alto de los labios.
Quisiera poder traducir las alusiones al mancebo muerto y
las muchachas,
Y las alusiones al anciano y a las madres, cuyos vástagos
les fueron arrebatados de sus brazos.
¿Qué piensas tú del destino del mancebo y del anciano?
¿Y qué piensas que fue de esas mujeres y de esos niños?
Ellos están vivos y bien en alguna parte;
El retoño más diminuto prueba que, en realidad, no existe
la muerte;
Y que, si alguna vez existió fue únicamente para engendrar
vida, que sólo aguardó el final para detenernos,
Y que cesó en el instante mismo de aparecer la vida.
Todo avanza hacia adelante y hacia arriba- nada perece;
Y la muerte es diferente de lo que algunos suponen, y más venturosa.

PÁGINA SOBRE EL MÁS GRANDE POETA DEL YO

Walt Whihman - Hojas de Hierba

En alguna comunidad pidieron un poema de este libro, "Canto A Mi Mismo", este poema viene en el Libro "Leaves Of Grass" (Hojas de Hierba) que es una serie de Poesías del Gran Maestro Walt Withman, es la última versión del libro de Walt Whitman, con el añadido de un complemento ideal para leerla con fundamento: los densos prólogos que el poeta añadió a su obra desde aquella primera edición reducida de 1885 y por él mismo costeada.
Hace no mucho tiempo (Julio de 2005) se cumplieron 150 años de la edición del Leaves of Grass de Walt Whitman. La fecha fue recordada en este artículo: 'Leaves of Grass' at 150: As Exuberant and Encompassing as Ever del cual se extrae lo siguiente: El estilo la poesía de Whitman , alejado de los cánones de la poesía tradicional, así como el espíritu de libertad que en ella se respira, queda siempre entre quien lo lee. Aquí el párrafo final de lo que se dice de Whitman en esta página:
La poesía de Whitman ha sido traducida a las lenguas más importantes del mundo. Se le reconoce una influencia fundamental en la obra de William Carlos Williams, Wallace Stevens y Allen Ginsberg, que se inspiró fundamentalmente en la particular aproximación a la sexualidad de algunos poemas de Whitman. Muchos especialistas contemporáneos han explorado los vínculos entre su vida y su literatura. En la literatura en español han reconocido la influencia de Whitman y han explicitado su admiración y sus críticas por él, poetas como Federico García Lorca (Un poeta en Nueva York) y Pablo Neruda (Cantos de Vida y Esperanza).
Para los interesados: una selección de poemas de Whitman, Los Cien Años de Walt Whitman un artículo de William Ospina, un apunte sobre la traducción de "Song to myself": De Jorge Luis Borges a Walt Whitman: Por qué Borges sí escribe el implícito ‘yo’, algunos poemas de Whitman traducidos por León Felipe, la Oda a Walt Whitman por Federico García Lorca, Walt Whitman por Rubén Darío y una curiosidad: Frases célebres de W.W. En inglés: El Walt Whitman Archive, una página de la Biblioteca del Congreso Estadounidense con acceso a cuadernos de notas originales de Whitman, poemas de Whitman en su versión original.
La imagen de Whitman posterior a este párrafo ha sido obtenida del W.W. Archive y está fechada en Julio de 1854, es un grabado hecho en base a un daguerrotipo y fue usada en la primera edición de "Hojas de hierba" y en algunas de las subsiguientes. A pesar de no estar totalmente satisfecho con el resultado, Whitman insistía en su reproducción pues consideraba a la foto como parte del poema "Song to myself".
Estas son las versiones que tengo, espero sean de su agrado.